Buenos días, pues después de estar unos días «desaparecida», vamos más bien absorbida por un trabajo de clase y mucho ejercicio, vuelvo a estar por aquí. Que no me olvido de esto.
Y probando este finde recetas, que me han salido desastrosas, di con otra cajita de Copos de Avena. Cosa que salté de alegría por que utilizo muchísimo la avena y ya me quedaba poca en el bote de galletas.
Si hablamos de las propiedades de la avena podríamos estar hasta mañana hablando de ella, la verdad es que es un cereal muy versátil. Se puede usar de muchísimas maneras en el desayuno, por ejemplo con leche directamente o previamente cocida.
También se puede usar con yogur ( natural o griego ) y acompañado de frutas, tipo muesli casero. O si no os gusta su sabor, mezclar la leche con algo de café o cacao. También se puede usar con otros tipos de leche, como la de almendras.
Aunque mi versión favorita es en tortitas, sí tortitas de avena. Prometo poner próximamente la receta, que es muy sencilla y muy rica. Palabrita. Ahora se me viene a la mente un porridge escocés riquísimo que probé hace un par de años, avena acompañada de canela y frambuesas… ay! qué tiempos aquellos, espero volver pronto.
La verdad es que me encanta la avena por que puedo desayunar más tranquila sin estar comiendo los típicos cereales de caja súper procesados y refinados, vamos una bomba de azúcar que son. En cambio ( podéis ver la información nutricional en la fotografía ), la avena apenas tiene azúcar, pero aporta bastante energía. Y sacia bastante, aunque no es difícil de digerir, por si hay alguien con problemas estomacales.
Actualmente ya no compro esa marca, si no que prefiero la Ecológica o Bio de las tiendas veganas/vegetarianas que visito. Es una tontería pero me gusta más que sea 100% avena y lo más integral posible, y esta marca dice que puede contener trazos de otros frutos secos.
Lo dicho, prueben la avena y próximamente les traigo mi receta favorita. Pancakes de avena.
healthy in love 